Su objeto era celebrar como se merece la existencia de un espacio montañoso y a la vez litoral único en Europa por la diversidad de especies reproductoras de aves que aloja. Y el hecho de que el Gobierno de Cantabria se haya comprometido, tras años de insistencia, a incluirlo en la Red Natura 2000.
Por poner sólo un ejemplo: crían aquí, a muy escasa distancia, cormorán moñudo, chova piquigualda, paíño europeo y alimoche. Esta es, de hecho, una de las zonas con mayor densidad del buitre blanco. También de halcón peregrino... Y todo eso en un paisaje flipante:
Pues hay que imaginarla recorrida, estudiada, comprendida, amada y defendida por uno de los colectivos humanos más comprometidos y entusiastas que se puedan encontrar: el grupo local de SEO-Castro. En pocos lugares me ha quedado tan claro lo necesario que es fundir emoción, conocimiento, buen juicio y voluntad para salvar la tierra.
Acudir a sitios así, junto a personas como las que me invitaron a compartir con ellas estos días, me renueva y fortalece de una manera única. Así que muchísimas gracias a todos y todas por tantas emociones y tanto ejemplo. Y por hacerme sentir en mi casa desde el primer instante y hasta me tuve que marchar.
Me costó despedirme, ya lo sabéis. Volveré. Ya estoy volviendo.